Sobre mí
Creciendo en Austria—seamos sinceros, uno de los países más bellos del mundo—tuve el privilegio de disfrutar de montañas nevadas, lagos cristalinos y, lo más importante, una educación gratuita y de alta calidad. Mis padres, ambos austríacos, son ávidos viajeros y políglotas autodidactas. Mi padre habla siete idiomas con fluidez, mi madre cinco, y además del inglés, aprendieron estos idiomas de adultos. En verano, visitamos muchos países europeos, y durante los días de escuela, a menudo me despertaba con el sonido de los cursos de ruso de mi padre. ¡Esta exposición temprana definitivamente sentó las bases para mi camino!